A la III Promoción del Colegio Militar “Elías Aguirre” 1964-1966
Con alegría y emoción muy sincera, queremos reiterar la invitación para nuestra reunión por el 43º Aniversario, tal como lo hacemos desde que egresamos del Colegio Militar “Elías Aguirre”, en torno a una mesa fraterna, en que departiremos los compañeros de tantas alegrías, afanes, preocupaciones, desvelos, estudios y jolgorios. ¡Qué de recuerdos acudirán a la mente en este aniversario 43 de egresados!, y en el encuentro número 18 de la III Promoción, desde el Viernes 20, Sábado 21 y Domingo 22 de noviembre de 2009, según se detalla en el Programa General.
Mil gracias a Coco Noblecilla y Coco Novoa, excelentes compañeros de promoción para toda la vida, quienes vienen incentivando estas reuniones fraternales, desde hace muchos años, con solidaridad y tenacidad, en reuniones que todos recordaremos.
Recuerdos gratos, pero sin duda la huella del tiempo se ha hecho presente, en todo sentido, positivo y negativo. Saber, por ejemplo, que la familia es lo esencial, que merecemos un tiempo para disfrutar el producto del trabajo y del esfuerzo de tantos años, o si no, de qué vale trabajar si no nos damos espacio para gozar, de minutos que no volverán para detenernos a mirar una flor, un cielo estrellado, un amanecer, disfrutar de un rato de ocio, de amor o de otras cosas que nos permitan captar su esencia ahora, antes que sea tarde para nosotros, pues estamos en la edad dorada, cuando hoy es ayer.
Que gratificante, la mesa fraterna como siempre tendrá un grupo de compañeros unidos, sin distingos de ideas políticas, religiosas, filosóficas, económicas, deportivas (pero ¡Arriba Alianza!). Sin separaciones de ningún tipo; es lo que necesita nuestra patria, unidad, amor, vivir un presente, proyectar un futuro mejor.
Queridos compañeros, recordaremos tantas cosas, hechos, anécdotas; las marchas, los castigos, el servicio de imaginarias, las canciones de la nueva ola, las clases de Bos Taurus, del Teacher Nombera, en fin, un mundo de memorias. Nuestros éxitos y fracasos estudiantiles, líderes en ciernes, romances y desvaríos, ilusiones cumplidas y sueños frustrados, entre tantas otras cosas.
Lo importante, y ello debe comandar el verbo y la acción, es que nuestra esencia, espíritu y comunión de ideales trascienda, y que se mantenga viva la llama de esta generación de 1966.
Un cariñoso recuerdo de amor, reconocimiento y gratitud a nuestros padres y un sentimiento emocionado a los compañeros que ya no nos acompañan y que viajan por el Oriente eterno: Manuel Alemán M., Angel Ayala B., Marco Castro L., Carlos Delgado A., Juan Doig P., Carlos Linares P., Juan Monsalve M., José Otoya V., Jaime Santa Cruz P. y Luis Castañeda S..
Queremos estar contigo y departir porque eres nuestro compañero, queremos ser tu amigo, si es que ya no lo somos.
Aprovechemos el tiempo, que a nuestra edad se nos acaba. No olvidemos que en la medida que vamos quedando solos, son muy importantes las amistades, tolerarse y reírse de las mismas tonteras.
Estimados compañeros, que la alegría reine en esta próxima reunión, que su grato sabor, bromas y recuerdos nos acompañen largos días, pero que también quede el concepto de unión, de amistad perdurable, la necesidad de llamarse, de reunirse, de que tal vez una hora, cada ciertos días, dejemos de ser profesionales liberales tan importantes y ocupados, llamémonos, juntémonos, no es necesario una mesa opípara, a veces solo un café será suficiente, estrecharemos nuestras manos, nos miraremos a los ojos, tal vez nos contemos algún problema, una alegría, una pena, un consejo, una ayuda o simplemente conversemos del ayer, del hoy o del mañana. Es útil y necesario.
Los aprecio mucho y les deseo éxito y felicidad en lo humano, espiritual y profesional junto a sus familias, sostén y faro de nuestras vidas y quehaceres.
Gracias y hasta siempre.
Julio César Mendoza, Jorge Noblecilla y Jorge Novoa
Con alegría y emoción muy sincera, queremos reiterar la invitación para nuestra reunión por el 43º Aniversario, tal como lo hacemos desde que egresamos del Colegio Militar “Elías Aguirre”, en torno a una mesa fraterna, en que departiremos los compañeros de tantas alegrías, afanes, preocupaciones, desvelos, estudios y jolgorios. ¡Qué de recuerdos acudirán a la mente en este aniversario 43 de egresados!, y en el encuentro número 18 de la III Promoción, desde el Viernes 20, Sábado 21 y Domingo 22 de noviembre de 2009, según se detalla en el Programa General.
Mil gracias a Coco Noblecilla y Coco Novoa, excelentes compañeros de promoción para toda la vida, quienes vienen incentivando estas reuniones fraternales, desde hace muchos años, con solidaridad y tenacidad, en reuniones que todos recordaremos.
Recuerdos gratos, pero sin duda la huella del tiempo se ha hecho presente, en todo sentido, positivo y negativo. Saber, por ejemplo, que la familia es lo esencial, que merecemos un tiempo para disfrutar el producto del trabajo y del esfuerzo de tantos años, o si no, de qué vale trabajar si no nos damos espacio para gozar, de minutos que no volverán para detenernos a mirar una flor, un cielo estrellado, un amanecer, disfrutar de un rato de ocio, de amor o de otras cosas que nos permitan captar su esencia ahora, antes que sea tarde para nosotros, pues estamos en la edad dorada, cuando hoy es ayer.
Que gratificante, la mesa fraterna como siempre tendrá un grupo de compañeros unidos, sin distingos de ideas políticas, religiosas, filosóficas, económicas, deportivas (pero ¡Arriba Alianza!). Sin separaciones de ningún tipo; es lo que necesita nuestra patria, unidad, amor, vivir un presente, proyectar un futuro mejor.
Queridos compañeros, recordaremos tantas cosas, hechos, anécdotas; las marchas, los castigos, el servicio de imaginarias, las canciones de la nueva ola, las clases de Bos Taurus, del Teacher Nombera, en fin, un mundo de memorias. Nuestros éxitos y fracasos estudiantiles, líderes en ciernes, romances y desvaríos, ilusiones cumplidas y sueños frustrados, entre tantas otras cosas.
Lo importante, y ello debe comandar el verbo y la acción, es que nuestra esencia, espíritu y comunión de ideales trascienda, y que se mantenga viva la llama de esta generación de 1966.
Un cariñoso recuerdo de amor, reconocimiento y gratitud a nuestros padres y un sentimiento emocionado a los compañeros que ya no nos acompañan y que viajan por el Oriente eterno: Manuel Alemán M., Angel Ayala B., Marco Castro L., Carlos Delgado A., Juan Doig P., Carlos Linares P., Juan Monsalve M., José Otoya V., Jaime Santa Cruz P. y Luis Castañeda S..
Queremos estar contigo y departir porque eres nuestro compañero, queremos ser tu amigo, si es que ya no lo somos.
Aprovechemos el tiempo, que a nuestra edad se nos acaba. No olvidemos que en la medida que vamos quedando solos, son muy importantes las amistades, tolerarse y reírse de las mismas tonteras.
Estimados compañeros, que la alegría reine en esta próxima reunión, que su grato sabor, bromas y recuerdos nos acompañen largos días, pero que también quede el concepto de unión, de amistad perdurable, la necesidad de llamarse, de reunirse, de que tal vez una hora, cada ciertos días, dejemos de ser profesionales liberales tan importantes y ocupados, llamémonos, juntémonos, no es necesario una mesa opípara, a veces solo un café será suficiente, estrecharemos nuestras manos, nos miraremos a los ojos, tal vez nos contemos algún problema, una alegría, una pena, un consejo, una ayuda o simplemente conversemos del ayer, del hoy o del mañana. Es útil y necesario.
Los aprecio mucho y les deseo éxito y felicidad en lo humano, espiritual y profesional junto a sus familias, sostén y faro de nuestras vidas y quehaceres.
Gracias y hasta siempre.
Julio César Mendoza, Jorge Noblecilla y Jorge Novoa
PD.- Mucho agradeceremos tu respuesta a nuestra invitación a:
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